El calentamiento global que comporta el cambio climático está disparando la sincronización del crecimiento anual de los árboles en grandes áreas geográficas, como los bosques mediterráneos o la taiga siberiana, según una investigación liderada por la Universitat de Lleida (UdL).
El trabajo, publicado en la revista norteamericana 'PNAS' apunta que puede poner en peligro el equilibrio de los ecosistemas, puesto que el aumento de sincronización se considera un posible factor desencadenante de la extinción de poblaciones enteras.
"Estas tendencias que afectan bosques separados entre sí hasta 1.000 kilómetros pueden ser útiles para establecer umbrales climáticos para la supervivencia de los árboles y para anticipar fenómenos de decaimientos de bosques a los niveles local y regional", destaca el catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agraria (Etsea) de la UdL e investigador de Agrotecnio, Jordi Voltas.
En el estudio que ha coordinado también han participado investigadores de la Universitat de Barcelona (UB) --Pablo Olavide de Sevilla--, de la Politécnica de Madrid, el Institut Pirinenc d'Ecologia-CSIC, la Siberian Federal University y el Sukachev Institute of Forest, de Rusia.
Una vez los investigadores han comprobado que el aumento de la sincronización del crecimiento de los árboles afecta a dos importantes ecosistemas terrestres, el objetivo es ampliar el análisis en otras zonas más allá de la Mediterránea y la Siberia rusa.
"Querríamos extender nuestra investigación a otros ecosistemas forestales del planeta para determinar la relevancia de estos fenómenos de sincronía creciente a escala global", ha anunciado Jordi Voltas.
Los expertos han analizado grandes bases de datos sobre sortijas de crecimiento de los árboles, que permiten remontarse a décadas de antigüedad.
Han estudiado las cronologías de seis especies de coníferas en la Siberia central y a los bosques de España durante los últimos 120 años.
Han descubierto que el incremento de la sincronización afecta a escala subcontinental desde la segunda mitad del siglo XX.
"El calentamiento global está enmascarando la influencia de otros factores locales que controlan el crecimiento de los árboles como por ejemplo la fertilidad del suelo, la competencia entre árboles, las diferencias entre especies en la forma en que reaccionan en frente al estrés ambiental, el manejo del bosque o la influencia de plagas y enfermedades", detalla el profesor de la UdL.