El pasado viernes se vivió el enésimo intento de saltar la valla que separa Marruecos con España. Una avalancha de unas 2.000 personas se tradujo en una tragedia que todavía colea en el Gobierno de España. Según los datos oficiales marroquíes, 23 personas fallecieron mientras que las ONG cifran en 37 las muertes.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ensalzó el trabajo de las fuerzas policiales españolas y marroquíes apenas un día después de la tragedia, algo que generó una tormenta de reacciones en su contra y que a día de hoy continúa.
En el plano más cercano a la Comunidad Valenciana, el Consejo Valenciano de Cooperación exige una investigación “inmediata y rigurosa” de todo lo ocurrido en Melilla. Este lunes, el grupo de las diferentes ONG y grupos solidarios celebró una asamblea que sirvió para compartir una declaración en la que criticó duramente lo vivido el viernes.
“Es un incremento de la violencia causado por la cooperación entre España y Marruecos en materia migratoria y por pactos que contribuyen a acrecentar la violación de los Derechos Humanos”, afirman desde el Consejo.
Además, quisieron hacer un llamamiento: “Hacemos un llamamiento a representantes políticos, medios y sociedad en conjunto a promover relatos que respeten los derechos humanos y fomenten la paz. No hacerlo nos lleva a la más pura banalización del mal”.
Los grupos políticos, contra Sánchez
La masacre de Melilla también ha sido rechazada desde los diferentes grupos políticos. El Partido Popular y Podemos coinciden a la hora de exigir una investigación sobre las muertes y la actuación de las fuerzas policiales.
Compromís, ERC, EH Bildu y Más País entre otras fuerzas políticas han ido un paso más allá y han pedido una comparecencia pública de Pedro Sánchez y también de Fernando Grande Marlaska, ministro del Interior.