El tiempo en: Huelva
Viernes 19/04/2024  

La escritura perpetua

Dios y Satán

La lucha entre Satanás y Dios, con los fabulosos versos de John Milton, la proyecta Andrés Lima hacia el horror de las guerras

Publicado: 07/06/2023 ·
15:23
· Actualizado: 07/06/2023 · 15:23
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • Paraíso perdido.
Autor

Luis Eduardo Siles

Luis Eduardo Siles es periodista y escritor. Exdirector de informativos de Cadena Ser en Huelva y Odiel Información. Autor de 4 libros.

La escritura perpetua

Es un homenaje a la pasión por escribir. A través de temas culturales, cada artículo trata de formular una lectura de la vida y la política

VISITAR BLOG

John Milton publicó en 1667 su monumental y deslumbrante obra ‘Paraíso Perdido’, 10.000 versos con un fondo filosófico sobre la cuestión del mal y el sufrimiento para responder a la pregunta de por qué un Dios misericordioso y todopoderoso decide permitirlos cuando podría fácilmente evitarlos. Los románticos acogieron con fervor esta obra: Milton se inclina hacia las tesis de Satán. El director de teatro Andrés Lima es un consumado experto en convertir textos clásicos en sublimes, emocionantes y maravillosas gamberradas teatrales. Ya lo hizo en ‘Sueño’, versión de ‘Sueño de una noche de verano’, de Shakespeare, sobre el fallecimiento del padre, que termina definiendo la muerte como una brillante, desatada y colosal juerga discotequera. Andrés Lima, ahora, apoyado en el texto de Helena Tornero sobre el libro de Milton, ha creado en el María Guerrero de Madrid un montaje sensacional, de continuas escenas bellísimas, teatro/teatro, una obra que es una ética y una estética. El pulso entre Satanás y Dios está descrito desde una perspectiva actual, progresista, rebelde y feminista. Escribe Lima en el programa: “Para los que no obedecemos se nos reservan las tinieblas”. El montaje reivindica la ciencia, el saber y la liberación, y rompe frecuentemente en metateatro, en una interesante y adictiva reflexión sobre la creación teatral paralela a la creación divina, con el dramaturgo como dios/tirano de sus propios personajes. “Yo creé el teatro”, grita Satanás. Responderá más tarde Dios: “El infierno es como un teatro vacío de aplausos”. O, con ironía: “El mundo está lleno de teatro muy poco peligroso”.

La lucha entre Satanás y Dios, con los fabulosos versos de John Milton, la proyecta Andrés Lima hacia el horror de las guerras, tan vigente en la actualidad, con impactantes imágenes al fondo del escenario de destrucción en las batallas, de actos terroristas o de ataúdes. Porque la guerra constituye una constante de este imprescindible montaje. Satanás: “No fui yo quien inventó la guerra”. Dios: “Yo si sé lo que es la guerra: Es un homicidio organizado entre grupos”.

Pere Arquillué, con su vozarrón y capacidades histriónicas, pone sus innumerables registros interpretativos al servicio de este dios dolorido, retorcido y tiránico. Cristina Plazas compone un espectacular, atractivo y atormentado ángel caído. Cisne negro. Gritará: “Somos seres. No siervos. ¡Libertad y cielo!”. Libertad y cielo (cualquier día copia estas palabras como eslogan electoral algún partido político). Antológico ‘Paraíso perdido’, sí.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN