Los ex escoltas en huelga de hambre en la rotonda de Botafuegos desde hace ya un mes, Miguel Ángel Guerrero y José Vega, persisten en su ayuno ante la negativa de la empresa Sabico a emplearles para la vigilancia privada de la cárcel, como consideran que era el compromiso del Gobierno de la Nación.
Guerrero explicó que su intención inicial era anunciar el fin de su huelga de hambre, puesto que les han informado de que las empresas de seguridad que han resultado adjudicatarias de las labores de vigilancia del perímetro de los centros penitenciarios “en otros lugares de España” están “cumpliendo el requisito de contratar a los antiguos escoltas”, como planteaba el Ministerio del Interior .
Sin embargo, sus intenciones se han transformado al conocer que “la empresa Sabico -adjudicataria en el perímetro de Botafuegos- está formalizando los contratos con personas que no cumplen ese perfil”, contando, en su lugar, con “vigilantes y personas sin experiencia”.
Entienden que Sabico ha interpretado erróneamente su huelga de hambre como un ataque contra la empresa y, en consecuencia, ha decidido “dejarles en la cuneta”. Incidieron en que el 2 de mayo van a “radicalizar” su huelga de hambre si no hay soluciones.
Visitas
Por su parte, el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce; y el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, visitaron ayer a los ex escoltas para trasladarles su apoyo.
Chamizo pidió a los antiguos escoltas que no extremen su protesta, puesto que han anunciado que a partir del próximo día 2 únicamente ingerirán agua. El Defensor del Pueblo Andaluz se ha comprometido a “insistir” y seguir “luchando” para que tengan “una respuesta definitiva” .
Por su parte, Landaluce expresó su “gran preocupación” por la situación de salud que presentan Guerrero y Vega, a los que “entendemos moralmente”. Considera que tienen un problema con el que la sociedad debería tener “especial sensibilidad”, puesto que han protegido a personas “en unas condiciones muy difíciles y duras”.
