Recurren la autorización ambiental de la Junta al proyecto de Fertiberia en los fosfoyesos

Mesa de la Ría ha interpuesto una demanda contencioso administrativa contra la Autorización Ambiental Integrada (AAI) otorgada por la Junta de Andalucía al proyecto de Fertiberia de enterrado de los fosfoyesos en Huelva, por no atender a la evidencias científicas que alertan de los riesgos del mismo.

La organización, en un comunicado, ha recordado que el comité de expertos de las universidades de Huelva, Sevilla y Granada alertó de innumerables deficiencias en el proyecto, así como del inevitable hundimiento y colapso de las balsas si se recubren con arena añadiéndole más peso.

De manera paralela, en un escrito dirigido a la Audiencia Nacional, la organización ha afirmado que el proyecto de recrecido y enterrado de los fosfoyesos produce efectos paisajísticos dañinos al entorno.

Esta organización, personada en el procedimiento de ejecución de sentencia ante la Audiencia Nacional, ha informado al alto tribunal de que, en el proceso de tramitación de la AAI de la Junta, le remitió un escrito al Ministerio recordándole su obligación legal de emitir un informe sectorial sobre la necesidad de garantizar que el proyecto de Fertiberia "evite la formación de pantallas arquitectónicas o acumulación de volúmenes".

Un informe que tanto el Ministerio como su Servicio Provincial de Costas eludieron emitir pese a que fue requerido expresamente por Mesa de la Ría, según la fuente.

El proyecto de enterrado de fosfoyesos 'Restore 2030' de Fertiberia, que no se ubica en "zona de influencia" sino en la de "dominio público", propone la cubrición y recrecido en altura con tierra de las balsas de fosfoyesos hasta una altura de unos 25 metros en la balsa-2 a lo largo de 1,9 kilómetros.

Dicho frente abarca una superficie de apantallamiento de unos 49.075 metros cuadrados, frente a los 4.000 del proyecto.

El arquitecto y presidente de Mesa de la Ría Juan Manuel Buendía ha alertado de que el proyecto de Fertiberia incumple los artículos 30 de la Ley de Costas y 49 del Reglamento General de Costas, pues "provoca la formación de pantallas arquitectónicas o acumulación de volúmenes, de tal manera que la disposición y altura de la Balsa-2 limita el campo visual entre el estuario a la ciudad y desfigura la perspectiva del borde litoral".

Así mismo, la organización ha señalado que sigue trabajando para detener un proyecto fraccionado que sólo propone actuaciones para una parte de las balsas y que incumple el precepto de la ley de Costas de "ocupación mínima de la marisma", con vistas a que se paralice el proyecto y se obligue a Fertiberia a la recuperación integral de la marisma.