Las autoridades turcas han puesto bajo custodia policial a la esposa y los dos hijos del presunto autor del atentado terrorista de Estambul, en el que murieron 39 personas, aunque no se ha revelado su identidad, informaron hoy medios turcos.
"La policía sabe la identidad del atacante (aunque no la ha revelado a pesar de publicar su foto) y su familia está en custodia policial", indicó el diario Hürriyet.
El Cumhuriyet, que también afirma que la familia está custodiada por la policía en la ciudad Konya (centro), asegura que ha hablado con la esposa del atacante y que éste proviene de Kirguizistán.
"Me enteré del ataque por televisión. No sabía que mi marido era simpatizante (del EI)", dijo la mujer al rotativo, según el cual el terrorista y su familia llegaron el 20 de noviembre en vuelo desde Kirguizistán al aeropuerto de Estambul, desde donde fueron a Ankara y el 22 de noviembre, a Konya.
Allí "alquiló un estudio por 1.100 liras (unos 300 dólares) y pagó tres meses (por adelantado). Dijo que llegó a Konya a buscar trabajo. El 29 de noviembre viajó en automóvil a Estambul", asegura el rotativo.
Después de ver su foto, "varios vecinos del la casa que alquiló llamaron a la policía para decir que lo habían reconocido", añade.
Otros medios, como el diario Habertürk, afirma que el terrorista procede de una región al noroeste de China, poblada mayoritariamente por uigures, de religión musulmana y con una lengua similar al turco.
La policía turca continúa hoy con sus intensas operaciones simultáneas en varios puntos de Estambul, para capturar al asesino que, una hora y media después de iniciarse 2017, disparó a bocajarro a los centenares de personas que festejaban la llegada del Año Nuevo en el exclusivo club Reina.
Tras el ataque en la discoteca, el sospechoso subió a un taxi y desde allí llamó a alguien que se encontraba en el barrio de Zeytinburnu, por lo que la policía pudo esclarecer detalles sobre su identidad.
El principal operativo se desplegó anoche en los barrios de Zeytinburnu y Basaksehir, ambos en la parte europea de Estambul.
En Zeytinburnu fueron detenidas 12 personas relacionadas con el ataque o con presuntos vínculos con el EI.
Varios testigos del ataque informaron de que cada vez que el atacante cambiaba de cartucho, tiraba un objeto luminoso antes de volver a cargar y disparar, señaló Hürriyet.
Analistas de seguridad creen que se trata de una estrategia para distraer e iluminar al objetivo para poder seguir disparando, y es una señal de que el atacante tenía formación para combatir.
Por otro lado, medios locales publicaron un vídeo estilo "selfie" en el cuál se ve al atacante caminando por la plaza Taksim, en el centro de Estambul, reseñó HaberTürk.
Por la decoración de la plaza, se estima que el vídeo fue grabado antes del ataque en el club "Reina".