Un portavoz policial de la localidad de Pembroke Pines explicó que se había decidido el cierre de las escuelas con los estudiantes y profesores dentro como medida de precaución hasta que se investigue la amenaza.
El cierre afectó a 231 escuelas públicas y a 69 centros concertados que dependen del departamento de Educación del condado de Broward, así como los centros de preescolar.
El cierre de las escuelas supuso que ningún estudiante o profesor pudiese entrar o salir, al tiempo que se pidió a los padres que no acudieran a recoger a sus hijos hasta que se hubiese investigado la amenaza.
Una mujer no identificada envió un correo electrónico a una emisora de radio en el que alertó de que su marido le había dicho que iba a disparar de manera indiscriminada contra estudiantes y profesores, según la fuente policial.
Al parecer, la mujer se refirió a que el hecho podía ocurrir en la localidad de Pembroke Pines, pero la Policía decidió que el cierre temporal de las escuelas afectase a todo el condado de Broward.
El mismo portavoz policial dijo que todos los estudiantes están a salvo, que no ha ocurrido ningún incidente y que se investiga hasta qué punto la amenaza de una masacre es real.