Después de ver cómo zonas de Valencia y Alicante alcanzaron y superaron los 40 grados, los termómetros llegaron a sufrir una bajada de entre 10 y 15 grados
Asaja, UPA y COAG han incidido en que es necesario que se mantenga, ya que el estrés hídrico del olivar requiere de mayor abundancia de precipitaciones